El apego a las cosas materiales es esa dificultad que tenemos para deshacernos de algún objeto aun cuando sabemos que no lo necesitamos, que nos hace mal o que ya no lo vamos a usar más.
Algunos objetos nos dan sensación de seguridad, nos traen recuerdos o emociones.
Muchos de los motivos por los que los guardamos son: porque me lo regalaron, me costó mucho dinero, …
Aunque no los utilicemos nunca, pensamos que en algún momento los vamos a necesitar y por eso acumulamos muchos objetos.
Cómo afecta al orden en casa
Este problema del apego material está ocasionando problemas de acumulación en la mayoría de hogares.
En el armario, por ejemplo, solemos tener ropa cara que un día nos compramos y que no usamos, prendas que se han quedado pequeñas y pensamos que en algún momento nos van a volver a caber, cosas que ya no nos gustan…
Por eso, es muy importante hacer cambios de armario. Así nos deshacemos de toda esa ropa que no nos vamos a poner más y ocupa muchísimo espacio en nuestro armario.
Estrategias para el desapego
El primer paso el desapego es darte cuenta de que tienes un problema para deshacerte de cosas que ya no necesitamos en nuestra vida.
Hay que entender que los objetos tienen una vida útil y que tarde o temprano nos tendremos que deshacer de ellos.
Después, hazte estas preguntas:
-¿De verdad necesito este objeto?
-¿Lo tengo guardado porque me lo regalaron?
-¿Tengo varios parecidos que cumplen la misma función?
-¿Cuándo lo miro me da felicidad?
Muchas veces, tirar algo que nos regalaron o que nos costó mucho dinero nos hace sentir mal.
Sin embargo, tienes que pensar que, si lo donas, alguien lo puede necesitar de verdad.
1. Haz una lista de los objetos que más te cuesta deshacerte de tu casa.
2. Valora del 1 al 3 su importancia, siendo 1 “inútil “, 2 “a veces útil” y 3 “muy útil“.
3. Aparta los que has catalogado como “muy útil” y busca un espacio en tu casa para ellos.
4. Para objetos valorados como “inútil” y “a veces útil” hazte estas preguntas: ¿Está en buen estado? ¿Lo he usado en los últimos 3 meses? ¿Me gusta cómo queda? ¿Es algo que me aporta valor?
5. Si la respuesta es negativa, ponlos en una bolsa y tíralos o dónalos.
Una vez que ya hayas vencido el apego, tienes que tenerlo muy presente a la hora de comprar cosas nuevas.
Compra cada cosa con consciencia y pensando la utilidad que va a tener.
¿Qué te parece? ¿Crees que te va a ayudar a librarte del apego?